martes, 25 de octubre de 2011

La vigencia de La Foca


Foto: Misiones On Line
Titulo: Marcelo "La Foca" Reyes

lunes, 24 de octubre de 2011

jueves, 13 de octubre de 2011

Leyenda Misioneras

EL POMBERO

Características físicas


Lo definen como un hombre de baja estatura, fornido, moreno y retacón, con abundante vellosidad en partes especificas y brazos tan largos que los arrastra. A veces usa un enorme sombrero de paja y luce andrajoso, puede llevar una bolsa al hombro. Se cuenta que sus pisadas no se sienten. Sus pies se pueden dar la vuelta, de manera que confunde a aquellos que quieren seguirlo, aunque ésta es una característica de una población indígena del Chaco paraguayo denominados pyta jovái (Talones Dobles), porque al utilizar unas zapatillas de plantilla rectangular era imposible descubrir hacia donde se dirigía en caminate en el polvoriento suelo chaqueño. La mayoría de las versiones coinciden en describirlo con la boca grande y alargada y los dientes muy blancos; los ojos chatos, como los del sapo, una mirada fija, como la lechuza; y las cejas de pelo largo.

Mitología


Puede ser amigo o enemigo del hombre, según la conducta de éste. El hombre que quiera tener de aliado a este duende puede dejar ofrendas por la noche como tabaco, miel o "caña" (aguardiente, en otros lados). Generalmente, la gente del campo le piden favores como hacer crecer los cultivos en abundancia, cuidar de los animales de corral, etc. Pero después de pedirle un favor no deben olvidarse jamás de hacer la misma ofrenda todas las noches durante 30 días porque si lo olvidan, despertarán su furia haciendo innumerables maldades en aquel hogar.

Nunca debe pronunciarse su nombre en voz alta, hablar mal de él o silbar en horas de la noche, porque esto lo enoja. Puede vengarse molestando o ensañándose con esa persona. Un mero roce con sus manos peludas puede producir que la persona se torne zonza, muda o experimente temblores. Se dice que si se le imita el grito, el Pombero puede contestar de manera enloquecedora. Por eso, y para no ofenderle, la gente prefiere nombrarlo en voz baja y se guarda de pronunciar su nombre en las reuniones nocturnas.

Fuente: Wikipedia
Imagenes: Internet y archivo personal de Agrofor

martes, 11 de octubre de 2011

Ya nada es lo que solía ser...

Yo solía creer que el fútbol, el asado y el vino eran cosas exclusivamente de hombres.
Yo solía creer que el durazno es una fruta y no un color; que el turqueza se nombraba solamente cuando se hablaba del color de un vestido; que los nombres permitidos para un perro solamente podían ser "batuque", "corbata" o "asesino"...
Yo solía creer que Corrientes, la tierra del Taraguí era cuna de machos indómitos, de gente gaucha y gentil, pero por sobre todo con una hombría a prueba de todo...Yo solía creer...
Ya nada es lo que parecía ser...

Un abrazo a todos